Tomado de VOA
Dos periodistas que trabajan en el interior de Venezuela cuentan cómo a través de las redes sociales han logrado conseguir una audiencia y monetizar su contenido, mientras sirven al público que busca estar informado.
CARACAS —
Desde las protestas antigubernamentales que estallaron en Venezuela en 2014, el periodista Lenin Danieri comenzó a usar sus redes sociales para comunicar la situación que se vivía en el estado Zulia, de donde es originario.
El trabajo del comunicador pronto le rindió frutos, y le hizo no solo obtener gran cantidad de seguidores, sino posicionar su nombre como referencia periodística a la hora de buscar información sobre esa entidad.
Lenin Danieri se ha mantenido en esa línea desde entonces, aunque hace unos meses, empujado por la crisis en los medios tradicionales y los bajos salarios que perciben los periodistas, decidió también usar sus redes como un canal para generar ingresos.
La misma decisión tomó la joven periodista Pableysa Ostos hace un par de años, cuando en su natal estado Bolívar se conoció sobre la masacre de Tumeremo, un suceso en el que murieron 28 mineros y que estuvo lleno de hermetismo y falta de información oficial durante semanas.
“Entendí que mis redes podrían ser una canal para transmitir la información y así llegar a más personas, que se podían volver un portal, una ventana de denuncias”, recuerda en entrevista para la Voz de América.
Su comunidad en redes sociales creció y la convirtió en referencia de noticias en el estado Bolívar.
Este 27 de junio los periodistas venezolanos celebran su día en medio de un panorama desalentador de bajas remuneraciones que han llevado a muchos a tener hasta tres trabajos para costear sus gastos —el 62% de los trabajadores venezolanos tienen más de un trabajo, según la encuesta Tendencias de Gestión de Talento 2023 Mercer-UCAB. Además, el bloqueo de medios de comunicación digitales ha generado desempleo. De acuerdo con la ONG Venezuela Sin Filtro, el bloqueo digital ha afectado a 62 medios desde 2022.
Las redes sociales como negocio y canal informativo
Danieri cuenta con una comunidad de 154.000 seguidores distribuidos en Twitter, Instagram y Tiktok. En todas sus plataformas ofrece contenido diverso. Por ejemplo, en Tiktok tiene contenidos fijos, como un resumen semanal de noticias y el video del día. Allí también aprovecha para publicar a sus patrocinadores, al igual que en Instagram. En Twitter la publicación es más continua y está enfocada en videos de denuncias, y también sobre diversas situaciones de actualidad, como la crisis de gasolina.
“He estado dándole un poco más al tema de la monetización (…) Hay dueños de establecimientos que me han llegado y me preguntan qué deben hacer, o sea, cómo llegar a un acuerdo para visibilizar sus productos o su marca. Yo lo he estado haciendo, en TikTok e Instagram coloco los logos de las empresas a las que les hago ese tipo de servicios”, comentó a la VOA.
El trabajo de Danieri también ha sido una vitrina para encontrar los llamados “tigritos” (trabajos extra) en medios de comunicación tradicionales. Ha colaborado con cadenas como Telemundo y Univisión. También entrega material regularmente a Televen y trabaja con el portal de investigación Inside Crime.
Por su parte, Ostos tiene una comunidad de 135.000 seguidores entre Twitter e Instagram. Allí ofrece información diaria sobre los principales acontecimientos en el estado Bolívar.
Al igual que Danieri, la comunicadora comenzó a monetizar con sus redes sociales luego de que varias marcas le consultaron si estaba dispuesta a hacer publicidad.
“He usado redes como medio para publicidad porque la misma gente me preguntaba si ofrecía ese servicio y entonces me adapté. Ha sido una experiencia nueva”, dijo.
La exposición de su trabajo en redes también le ha permitido encontrar trabajos puntuales en medios de comunicación tradicionales, tanto nacionales como internacionales, agregó.
“El periodista tiene que ir a la par de los cambios”
Para Ostos, la censura en Venezuela ha obligado a los periodistas a reinventarse, al punto de convertirse ellos mismos en los medios de comunicación.
“Las redes sociales han hecho que reinventemos la forma de comunicarnos. En Venezuela muchos portales están bloqueados. Entonces el que no tenga un VPN o no sepa cómo descargarlo, deja de leer ciertas noticias. Las redes sociales han hecho que como periodistas nos volvamos un medio de comunicación, una marca”, explicó.
Más allá de la crisis que vive el periodismo en Venezuela, Danieri dijo que las redes sociales también están cambiando la forma de llevar la información. A su juicio, el periodista debe adaptarse a los cambios para no quedar rezagado, aunque aclara que esto puede hacerse sin dejar de lado pilares que son fundamentales para la profesión, como por ejemplo, corroborar las noticias y también sus fuentes.
“El periodista tiene que ir a la par de esos cambios, si no, se va a quedar rezagado. No significa que vaya a desaparecer, siempre se va a necesitar de un periodista”, afirmó.
Danieri agregó que se han convertido «en los verdaderos agentes multiplicadores» de las quejas y los problemas de las personas, «para que estos se canalicen y tengan solución».
Ostos dijo que la inseguridad y la falta de recursos para hacer el trabajo periodístico también son retos actuales para los comunicadores venezolanos.
“La labor que hacen los periodistas es titánica y no quiero decir que somos héroes, pero admiro enormemente a cada colega que sigue acá sumando su grano de arena, cada uno desde su vitrina, medio, portal», dijo.
«No es que nuestra profesión está más golpeada que las demás, la verdad es que todos, desde el sector salud, educación, hasta las amas de casa estamos haciendo nuestra labor para sumarle algo distinto al país», concluyó.
APLP