Tomado de El Magazín Cultural
¿Dónde está el buen periodismo? La pregunta atraviesa la espina dorsal de un oficio que busca contar a cada instante las anomalías de este mundo. La misma que formulan los editores, receptores en últimas, que demandan informaciones verídicas todos los días. Nos la hicimos como jurado del premio que nos convoca y nos la repetimos aquí, a pocos meses de la decapitación de dos reporteros norteamericanos, transmitida al mundo por internet; a escasos meses también del asesinato del colega Luis Cervantes, periodista de radio comunitaria, muerto a tiros por sicarios, en aparente represalia por su labor, cuando el Estado le había retirado sus guardaespaldas, en Tarazá, Antioquia. (Recomendamos: Semblanza de Heriberto Fiorillo, un creador multimedia).
En Colombia aumentan las agresiones a periodistas. Entre el 2013 y el 2014, reporteros de Cali y Buenaventura, del Bajo Cauca, Montería y la Guajira, fueron atacados o amenazados por delincuentes; son más de noventa en lo que va del año. La cifra dobla la del anterior. 1 La impunidad en estos casos no resulta histórica. Lo histórico es que más bien nunca se capture a los culpables de los delitos contra periodistas.
APLP